“Personas desconocidas”
de John Katzenbach es una buena novela policíaca de suspense.
Gabriel
Dickinson y Marta Rodriguez-Johnson son dos policías cuyas vidas han sido sacudidas
por la tragedia. Marta, agente destinada en narcóticos, vive con su madre e
hija, tras enviudar cuando su marido, militar, fallece en Afganistán. Además, durante
el transcurso de una redada, Marta dispara y mata a su compañero por error, en
la oscuridad de un sótano, mientras buscaban a un delincuente. Por su parte, Gabriel,
burócrata del departamento de policía local ve truncada su carrera por los
cambios en su situación personal. Su mujer se ha separado de él llevándose a su
hijo, con el que ha perdido prácticamente el contacto tras iniciar ella una
nueva relación de pareja. Su ahora exesposa nunca le perdonará el fallecimiento
de su hermano en una aparentemente inocente excursión de pesca; la embarcación
de Gabriel y su cuñado volcó a causa de una fuerte ráfaga de viento en un lago,
en medio de una inesperada tormenta. Solo y hundido, Gabriel se refugia en el
alcohol.
Ambos
inspectores pierden la confianza de sus respectivos departamentos, son
degradados laboralmente y destinados a resolver casos del pasado que no han sido
cerrados, trabajo que nadie quiere hacer. Pero será en la soledad y el
ostracismo de la “mazmorra”, nombre con el que bautizan al despacho lúgubre que
les asignan, donde sus almas de detectives resurjan de nuevo tras tropezar
Marta con cuatro expedientes sin resolver, de veinte años atrás, con varias
cosas en común: los cuatro fueron asesinatos y todos quedaron a cargo de dos policías
caracterizados por su conocida solvencia y eficacia dentro del departamento.
Gabriel
y Marta deciden iniciar sus pesquisas entrevistándose con esos agentes, ahora
ya retirados. Comienzan con el exinspector O’Hara que vive con su esposa en un
pequeño apartamento en una residencia para la tercera edad gestionada por la
iglesia. El anciano, aquejado de Alzheimer, pronuncia inesperadamente un nombre
dirigiéndose a Marta; Tessa. Las indagaciones siguen su curso con la entrevista
al segundo integrante del dúo de policías, Joe Martin, un hombre afable que
reacciona primero con sorprendente tranquilidad, pero luego de forma inesperada
y fulminante, cuando Marta le menciona el nombre que les ha desvelado su
compañero enfermo.
Ahora,
si decidís leer esta novela, os tocará a vosotros descubrir la relación de los
cuatro casos de los policías retirados, con la impactante desaparición, muy
próxima en el tiempo, en un seguro barrio residencial de la ciudad, de una
joven de 13 años, algo que conmocionó a toda la ciudad, y seguir las peligrosas
averiguaciones que hacen Gabriel y Marta sobre ello. Por las páginas del libro
pasarán los padres de la niña, los mejores amigos de la familia y su hija,
últimos en ver con vida a la niña, la extraña implicación en el caso de un
narcotraficante encarcelado, las trabas que se les pone a los protagonistas desde
las más altas instancias del cuerpo de policía…etc.
Os
dejo con este buen thriller, bien elaborado, en el que dos agentes de policía,
cuyas carreras parecen haberse arruinado, se reencuentran consigo mismos, mientras
ponen todo su empeño en descubrir la verdad sobre unos hechos que parece que
toda una comunidad se empeña en olvidar.
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