“Jaque a la logia”, de Antonio
Monclús, es una novela que nos introduce en el mundo de la masonería.
Una serie de
atentados y asesinatos en diversas partes del orbe sacuden los cimientos de las
principales logias. El denominador común de estos actos terroristas es la
aparición, en cada uno de los escenarios, de un mensaje dirigido a sus grandes
maestros junto a una enigmática carta del tarot. Las diferentes logias se unirán
en la búsqueda de la causa de estos hechos. Las investigaciones les llevaran a
relacionar esos terribles acontecimientos con unos documentos aparecidos unos
años antes en la restauración de la Aljafería zaragozana, que habían
pertenecido a Pedro Arbués, inquisidor mayor de Aragón, asesinado en 1485.
El
equipo internacional de investigación de la masonería acabará confiando las
pesquisas a dos miembros de la logia hispánica, Germinal Montseny, y su
ayudante y joven seductor, Juan Servet, traductor y conocedor del tarot, que ya
estaban encargados de indagar y esclarecer el posible asesinato de un miembro
de su propia logia en Madrid.
El
libro se deja leer; aunque a mí me parece que, mientras que el desarrollo de la
trama, en gran parte del libro, es ágil y entretenido, el final se vuelve, en
pocas páginas, lento y, quizá, un poco insulso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario